El 18 de julio en la institución celebramos el día de la
independencia, celebrando los 200 años de “libertad”.
Consideramos
que desde ese día en que se quebró un florero somos libres; pues sí, somos
libres de cierta forma; ya que nadie es dueño de nosotros como individuos, pero
como país pertenecemos a las grandes potencias, los países a los que les
debemos plata de quien sabe qué, que paso hace muchos años; las personas de
color no le pertenecen a nadie, pero ya todos por igual le pertenecemos al dinero,
a las dichosas empresas que no nos dejan vivir ni gozar de esa llamada
libertad; las mujeres no dependen de nadie para vivir, pero son golpeadas y algunos
de sus derechos son violados por aquellos hombres que aun se creen más que
nosotras; tenemos libertad de expresión, pero cuando se trata de un político con
un gran cargo es mejor callas, cuando se trata de las diferencias de los gustos
sexuales es mejor callar, cuando estás en desacuerdo con alguna ley o alguna
cosa mal hecha por parte de la policía, gobierno o algún otro grupo como estos
es mejor callar.
Si
así es la vida con libertad, te imaginas como fue en la época de nuestros
antepasados cuando esa libertad era inalcanzable por todos ; si, nuestro país ha
mejorado pero le falta muchos más por cambiar para podernos llamar un país libre
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